Bámbola, una joven campesina italiana, desborda vitalidad, tanta, que
todo a su paso se inunda de vida y acaba ahogandose incapaz de
sobrevivir a su energía. El padre, el novio, el pretendiente, el
enamorado, el amante, todos sucumben ante Bámbola.
MI OPI: A Bigas Luna se le fueron las manos al retratar la vida y deseos de la
Bambola. Empieza queriendo dar profundidad al personaje como si de una
pastorcilla (pañuelo a la cabeza) se tratase, contandonos como ella
sufre al morir su única amiga (una cabra) y el desquicio de su madre,
para acabar en una producción érotico festiva aprovechandose de las
facilidad de la Marini por despelotarse.Me niego a hablar de argumento, pues no lo hay. Me niego a hablar de
guión, pues no lo hay. Me niego a hablar de dirección de actores, pues
no la hay. Me niego a hablar del descubrimiento erótico de Valeria
Marini, pues ésta es menos actriz y menos expresiva que la cabrita a la
que quiere tanto. Me niego a hablar de los actores, pues del primero al
último están horribles, histriónicos, penosos (y sino hay queda la
hiriente y castrante breve aparición de Anita Ekberg). Me niego a hablar
de una película, pues esto es uN truño como una catedral.
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