Nathan es un brillante abogado de Nueva York cuyo éxito profesional contrasta con su problemática vida privada, que ha quedado marcada por su divorcio de Claire, su único amor. En medio de su pesar conoce al doctor KaY, un misterioso médico que le asegura que tiene facultades para percibir la proximidad de la muerte. Esta afirmación se verá reforzada a medida que Nathan le vaya revelando episodios de su pasado: por ejemplo, cuando tenía sólo ocho años, se zambulló en agua helada para salvar a una niña y sufrió un paro cardíaco que le provocó una breve muerte clínica.
MI OPI: Es un filme raro, que va de mayor a menor, pues lo que al principio parece ser una trama intrigante y enigmática gracias a su premisa argumental teñida de aspectos sobrenaturales, poco a poco se va transformando en un melodrama muy soso y anodino con el que es muy difícil poder mantenerse atento y entretenido. Tampoco se puede decir que sea una cinta insoportable que te duerma en su desarrollo, porque al menos te tiene mínimamente enganchado a lo que sucede, algo de suspense posee, está bien interpretada (John Malkovich tiene esa gracia tan especial de hacer muy intrigantes sus personajes) y además posee una bonita y armoniosa banda sonora de fondo como para ir acompañando de manera amena a las imágenes. Pero claro, aquel que pretenda un filme de intriga sobrenatural potente y muy bien elucubrado en su argumento se verá decepcionado porque la cinta se desarrolla de manera muy cansina y parsimoniosa, con una atmósfera enrarecida, donde en muchos pasajes pasa bien poco, y con algunos fragmentos en los cuales el filme irradia un tufillo a cinta “new age” de autoayuda que no me termina de convencer. Es una película que lamentablemente no sorprende con su giro sorpresa final, que no emociona con los sentimientos y pesares de sus personajes y que no termina de ser muy claro en la exposición de las ideas que dan vida a la trama. Es un filme que pretende parecer profundo e inteligente en sus planteos, que quiere alejarse de los convencionalismos impuestos por Hollywood para hacer ciencia ficción blanda pero que termina siendo muy poco entretenido y confuso en su desarrollo y en sus moralejas existencialistas acerca del destino y la muerte.
MI OPI: Es un filme raro, que va de mayor a menor, pues lo que al principio parece ser una trama intrigante y enigmática gracias a su premisa argumental teñida de aspectos sobrenaturales, poco a poco se va transformando en un melodrama muy soso y anodino con el que es muy difícil poder mantenerse atento y entretenido. Tampoco se puede decir que sea una cinta insoportable que te duerma en su desarrollo, porque al menos te tiene mínimamente enganchado a lo que sucede, algo de suspense posee, está bien interpretada (John Malkovich tiene esa gracia tan especial de hacer muy intrigantes sus personajes) y además posee una bonita y armoniosa banda sonora de fondo como para ir acompañando de manera amena a las imágenes. Pero claro, aquel que pretenda un filme de intriga sobrenatural potente y muy bien elucubrado en su argumento se verá decepcionado porque la cinta se desarrolla de manera muy cansina y parsimoniosa, con una atmósfera enrarecida, donde en muchos pasajes pasa bien poco, y con algunos fragmentos en los cuales el filme irradia un tufillo a cinta “new age” de autoayuda que no me termina de convencer. Es una película que lamentablemente no sorprende con su giro sorpresa final, que no emociona con los sentimientos y pesares de sus personajes y que no termina de ser muy claro en la exposición de las ideas que dan vida a la trama. Es un filme que pretende parecer profundo e inteligente en sus planteos, que quiere alejarse de los convencionalismos impuestos por Hollywood para hacer ciencia ficción blanda pero que termina siendo muy poco entretenido y confuso en su desarrollo y en sus moralejas existencialistas acerca del destino y la muerte.
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