MEDIANOCHE EN PARIS

Un escritor norteamericano algo bohemio llega con su prometida Inez y los padres de ésta a París. Mientras vaga por las calles soñando con los felices años 20, cae bajo una especie de hechizo que hace que, a medianoche, en algún lugar del barrio Latino, se vea transportado a otro universo donde va a conocer a personajes que jamás imaginaría iba a conocer... MI OPI: Es doloroso decir que el plateamiento de esta película es una gran idea pero con un desarrollo poco afortunado probablemente porque Allen se va haciendo mayor. Para los que amamos su cine, seguiremos viendo los destellos y los guiños al pasado (que fue mejor) como muy bien indica la película. Lo que antaño fuera ritmo y vivo ingenio es ahora cliché. Es cierto que hay momentos divertidos pero el conjunto es un refrito de su obra. Una vez más el decorado, ahora París, es carica-turístico... de postal con besos. Cuando se abre el telón se antoja la sospecha de la falsedad y cuando se cierra es tristemente evidenciada. La ciudad no se funde con los personajes ni con la trama como en Manhattan sino que parecen estar en otra dimensión. También es cierto que últimamente he sentido un distanciamiento con el cine de Woody ya que cada vez me cuesta más identificarme con sus personajes, incluso con su alter ego, aunque puedo entender su desazón me siento un tanto lejano con ese snobismo intelectual y menos en los tiempos que corren. Aún así tiene momentos de interés y reflexión y algún diálogo ingenioso pero no ha conseguido sacarle partido a la deliciosa historia que tenía entre manos. Ese cuento ya nos lo contó en la "Rosa Purpura del Cairo" de un modo más inspirado y/o "libre".