Sasha es un chico de vinticinco años que se asoma timidamente al mundo. Ha crecido en una comunidad para salir de la toxicodependencia, hijo de dos drogadictos: el padre ha muerto pronto, la madre lo ha abandonado en aquel círculo infernal donde Sasha ha encontrado una especie de equilibrio. Lejos de la vida real. Ajeno también al mundo en el que ha sido condenado a formarse, el único sano entre los enfermos. Y ahí, en Borgo Fiorito, ha aprendido a ocuparse del dolor de la gente y se ha encariñado con Riccardo – el jefe de la comunidad – como si fuera su verdadero padre. Y, sobretodo, ha conocido a Benedetta, una chiquilla de su edad, hija de un de los bienhechor externo, que cada Domingo va a visitar Borgo Fiorito, llevandole una ráfaga de ese mundo verdadero que parece que a él se le ha negado. Es inevitable, Sasha se ha enamorado de Benedetta.MI OPI: Infumable película romántica que aburre hasta al aburrimiento. Que el director y guionista sea el joven actor protagonista ya dice mucho, máxime si esta película encima está basada también en una novela suya...¿Se puede estirar más el chicle? El exceso de planos del protagonista en todo el metraje, unido a unos diálogos tan floridos y poco naturales, hilvanados en una historia tan símple y mil veces vista da el resultado de esta película floja que puedes hacer el favor de perderte. Aitana Sánchez Gijón es de lo mejorcito de la peli, aún así tampoco resulta muy creible, todo es tan impostado, pretensioso y superficial, desde las poses a las ropas, que parece que estamos viendo un videoclip. Esta peli parece que pretenda tener planos hermosos, como si sólo buscara esa finalidad, y si sólo nos da estética el fin queda plano, como una pizza extrafina sin extra de queso.
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