Davis Mitchell es un exitoso ejecutivo que sufre una
grave desconexión emocional tras la repentina y trágica muerte de su
mujer en un accidente de coche. Aunque su suegro intenta por todos los medios que se recupere, continúa bloqueado
y se dedica a desmontar compulsivamente toda clase de objetos. Gracias a
la ayuda de Karen y de su hijo, a los que acaba de
conocer, Davis empieza a reconstruir su vida.
MI OPI: Es evidente que a quien no le guste este tipo de cine, no entenderá la
película y le parecerá aburrida y lenta. Pero es profunda y está muy
bien desarrollada. Tiene un hondo contenido psicológico que nos ayudara a
pararnos a pensar en cómo percibimos nuestra vida y cuál es la mejor
formar de cerrar ciclos pasados. Todos de vez en cuando podríamos llegar a ser como el protagonista, tendemos a ignorar
las cosas que nos rodean por la rutina del día a día, o que simplemente
no apreciamos suficiente a las personas que tenemos a nuestro lado.
Olvidamos lo que realmente somos y actuamos por inercia. Vale, esto no
es nuevo, pero la forma de cómo lo presenta la película es fácil de
llevar, te entretiene todo el camino, hasta que de repente te atrapa. Jake Gyllenhaal con un despliegue interpretativo que te hará odiarlo,
amarlo, te sorprenderá, te seducirá, te hará reír y llorar...
No hay comentarios:
Publicar un comentario