Un hombre descubre que sólo le quedan 1.000 palabras que decir antes de morir.
MI OPI: Irregular cinta que por enésima vez trata el tema de la redención
espiritual de una persona materialista, falsa, egoísta, que debe cambiar
para acabar con alguna maldición. Muy flojo el guión, muy flojos los intérpretes. Eddie Murphy aparece en su típico personaje bufón repleto de
histrionismo y de morisquetas. Para algunos puede que sirva para al
menos sostener el débil argumento que hay de fondo, para otros será la
gota que rebalsa el vaso y que termina de irritar durante el visionado
del filme. Entretenimiento no hay, es apenas un flojo pasatiempo, un filme que se
mira sin siquiera pensarlo y que se descarta muy rápidamente porque sus
situaciones son muy fácilmente olvidables.
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