Mark O'Brien, un poeta y periodista tetrapléjico y con un
pulmón de acero que decide que, a sus 38 años, ya es hora de perder la
virginidad. Con la ayuda de su terapeuta y la orientación de un
sacerdote, Mark se pone en contacto con Cheryl
Cohen-Greene, una profesional del sexo.
MI OPI: Al igual que en otras películas sobre personas que poseen
discapacidades, lo importante es lo que sucede alrededor del
protagonista. Si esto es verdaderamente interesante ("Mi pie izquierdo",
"Intocable") la película asciende y te impregnas de lo va sucediendo;
por el contrario si esto no sucede ("La escafandra y la Mariposa") el
aburrimiento es lo único que queda. En "Las sesiones" esto último es lo que ocurre y se va quedando en una
mera sucesión de anécdotas sobre un tema concreto: la dificultad para
mantener relaciones sexuales desde la discapacidad física. Podemos decir que se queda a medias en todo:
¿Sensible?.....sí, pero no.¿¿Risas?....sí, pero no.
¿Buen guión?....sí, pero no.
¿Helen Hunt?....sí, pero no.
¿Te llega?... sí, pero no.
¿Necesaria?...sí, pero no.
¿La volvería a ver?...sí, pero no.
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